Lc 5.1-11 - "Llamados a dejar las redes" - Serie Llamados para trastornar el mundo 01
Llamados para trastornar el mundo • Sermon • Submitted • Presented • 48:21
0 ratings
· 344 viewsFiles
Notes
Transcript
BOSQUEJO
BOSQUEJO
Bosquejo Homilético
Introducción.
Nuestra iglesia es bonita.
No estamos en tiempos difíciles. Ilustración.
Siempre hubo tiempos difíciles. Hechos 17.6.
Y podrías creer que Dios eligió a super personas para hacer todo esto. Pero el llamó a personas comúnes.
Él nos está llamando a nosotros.
Así que en esta serie, vamos a ver cómo Dios llamó a personas comúnes para trastornar el mundo y que nosotros también podemos hacerlo.
Exégesis.
Pedro fue uno llamado, como nosotros.
Siguió a Jesús.
Renunció.....
Etc.
...
Meditemos la Palabra
Nos está llamando..
Iglesia.. evangelismo, discipulado, áreas.
Nosotros podemos trastornar el mundo.
Trastornar nuestro entorno con el evangelio.
Trastornar nuestras familias.
Ser parte del plan del evangelio de la Iglesia.
Conclusión
Él nos está llamando a nosotros.
INTRODUCCIÓN
INTRODUCCIÓN
Que linda está nuestra iglesia. El Señor esta obrando en cada una de las áreas donde tenemos la oportunidad de servir.
Todos hemos recibido un llamado para entregarnos al Señor y servirle.
Pero seguir de verdad a Jesucristo requiere mucho compromiso. A pesar de que en nuestro lugar no se evidencia las dificultades por este compromiso como en otros lugares.
No sé si has escuchado de “Mansuur Mohammed”.
Mansuur Mohammed era un somalí de 25 años que realizaba trabajo humanitario en su país, pero que recibió a Jesucristo como Señor y Salvador en 2006.
Militantes del grupo “al Shabab” lo capturaron en 2008 e invitaron a una “fiesta” a la aldea de Manyafulka, lo que nadie sabía es que este hombre iba a desfilar en la fiesta como ejemplo para todo el pueblo.
Los líderes militantes comenzaron a recitar el Corán, acusando a Mansuur Mohammed de apostasía. Un testigo dice que él no perdió la compostura mientras se burlaban de él. Y mientras sus captores proclamaban “Dios es grande”, Mansuur Mohammed fue decapitado.
El mensaje para el pueblo fue claro y una advertencia para quienes dejen el Islam y se conviertan al cristianismo: Quienes acepten a Jesús como Señor, tendrán que enfrentar la misma suerte.
Obedecer al llamado de Jesús, sí requiere de mucho compromiso.
Y es que siempre hubo tiempos difíciles.
No es esta una escena de circo romano de hace muchos siglos, sino que pasó hace apenas unos años.
Hay mucha gente que tiene un encuentro personal con Jesús, acude a su llamado y está dispuesto a dar la vida por Él. PERO ESTÁS SON LAS PERSONAS QUE IMPACTAN EL MUNDO CON SU FE EN JESUCRISTO.
¿Sabes? Para el mundo siempre ha sido una tortura la fe de los creyentes y por lo tanto, siempre hubo tiempos difíciles para cada uno que pone su fe en Cristo.
Pablo estaba en Tesalónica anunciando a Cristo y muchos judíos que no creían en Jesús estaban en búsqueda de Pablo para igualmente asesinarlo, alborotaron la ciudad y fueron a buscar a Pablo a una casa donde se hospedaba, pero no lo encontraron, sino a Jasón el dueño de la casa.
Fíjate lo que sucede:
6 Pero no hallándolos, trajeron a Jasón y a algunos hermanos ante las autoridades de la ciudad, gritando: Estos que trastornan el mundo entero también han venido acá; 7 a los cuales Jasón ha recibido; y todos éstos contravienen los decretos de César, diciendo que hay otro rey, Jesús.
Les acusaron de trastornar el mundo.
Nadie quiere que los cristianos estén ahí.
Todos quieren permanecer en la comodidad del mundo, que lleva a la condenación eterna. Mientras los cristianos tienen una misión del Creador, de llevar las buenas nuevas de Jesús.
TRASTORNAR - “cambiar o alterar la esencia o características de algo” - “poner de cabeza al mundo”.
Pero no fue la única vez que acusaron a los cristianos así.
Emperador Nerón - Totalmente desquiciado y con todo lo malo que era él, ni siquiera fue el emperador más malvado contra los cristianos.
Nerón, quería construir para sí mismo un Palacio más grande, así que decidió incendiar 10 de los 14 barrios de Roma. Acusaron a Nerón de provocar el incendio para su palacio. Y él acusó a los cristianos de causar el desastre a fin de desviar la culpa de sí mismo.
Se les acusó de “trastornar una vez más el mundo”.
Y aunque el evangelio más bien trae verdadera paz al mundo, siempre ha habido resistencia al evangelio de Jesús.
El Señor sigue llamando a personas para trastornar el mundo, porque aún quiere salvar.
Pero podrías pensar que las personas que hicieron esto fueron personas especiales, tal vez con capacidades distintas a nosotros, pero la respuesta es que ÉL llamó a personas comúnes, ordinarias, y solo hicieron un verdadero compromiso con Jesucristo, para ser usados por Él.
Y Él nos está llamando a nosotros también.
Así que en esta nueva serie corta:
Vamos a ver a personas ordinarias y corrientes, que fueron llamados por Jesús para trastornar el mundo, y de la misma manera, esperamos que todos nosotros, viéndonos como personas comúnes, también entendamos que el Señor Jesucristo espera usarnos de la misma manera.
Y que podamos en consecuencia hacer un compromiso firme con el Señor de obedecer su llamado y servirle.
DESARROLLO
DESARROLLO
Uno de los hombres que va a “trastornar el mundo”, es uno que nadie podría escoger para su equipo.
Tan solo Jesús puede hacer algo con los que nadie quiere escoger.
Imagina que estamos escogiendo equipos para jugar algún deporte, uno por uno, no sé si has estado en esa escena. Es muy incómoda, todos los que quieren jugar están alrededor de los capitanes, y van escogiendo uno por uno, pero a medida que se escogen los mejores, siempre los.. y no vamos a decir los “peores”, sino los “no tan buenos”, nos vamos quedando al final. Y muchas veces eres el último en ser escogido. Y es muy incómodo, aunque ya luego te acostumbras.
Por eso es mejor ser el que trae la pelota, así te escogen al inicio, sino no hay juego.
Pero ese último en ser escogido, sería un hombre llamado Simón.
Tal vez ya no para jugar un partido, sino para la tarea más importante que Dios iba a realizar sobre la humanidad.
Si hubiésemos nosotros haber elegido al acompañante de Jesús, hubiésemos escogido al mejor estudioso de la clase farisea, que sabía de memoria todo el Antiguo Testamento, que tal vez era un practicador de la oración y que siempre estaba presentando sus ofrendas.
En todo caso, tendría que ser alguien ilustrado, que sea la mejor herramienta para su humanidad, una enciclopedia de las Escrituras y una persona muy respestable por su intelecto.
¿Quién más podría acompañar al que ha descendido de los cielos para una misión evangelística?
Pero Jesús parece que quiere perder el partido.
¡Jesús llama al revés! Él escoge a los que no tienen nada de dotes o cualidades para hacer una misión tan grande.
Vayamos a Lucas 5.1 para ver cómo Jesús va a llamar a quien nadie podría haber llamado.
(LEER VERSÍCULOS SEGÚN SE AVANZA)
1 Aconteció que estando Jesús junto al lago de Genesaret, el gentío se agolpaba sobre él para oír la palabra de Dios.
“Aconteció que estando Jesús junto al lago de Genesaret, el gentío se agolpaba sobre él para oír la palabra de Dios.”
Es un día normal en Galilea. Debajo del río Jordán hay un gran espejo de agua.
Mar de Galilea o conocido también como el lago de Genesaret.
Pero alguien que quita toda la normalidad del día estaba ahí. Es Jesús.
Las personas se juntan y se agolpaban sobre él, para oír la Palabra de Dios.
Jesús está iniciando su ministerio y hay una sed muy grande de escuchar la Palabra de Dios, sobre todo de gente humilde.
2 Y vio dos barcas que estaban cerca de la orilla del lago; y los pescadores, habiendo descendido de ellas, lavaban sus redes.
“Y vio dos barcas que estaban cerca de la orilla del lago;..”
Jesús sabe que hay mucha gente que quiere escuchar la Palabra.
Acústicamente y estratégicamente para tener espacio, quiere subirse a una barca, alejarse un poco para poder anunciar a todos el evangelio.
Y hay dos barcas de pescadores.
Los pescadores son conocidos como gente muy ruda y fuerte porque es un trabajo físico intenso.
Su trabajo es fuerte y de esta manera se excluía a los más débiles de estas labores.
Son rudos de modales, ásperos al hablar y al tratar con los demás.
De hecho, como ejemplo:
Dos pescadores discípulos de Jesús, van a querer que caiga fuego sobre una aldea de samaritanos por no recibir a Jesús.
Se les apodará “hijos del trueno” por lo complicados y rudos que son.
Un pescador que sigue a Jesús va a sacar su espada sin temor para cortar la oreja al guardia que quiere apresar a Jesús.
Ellos están acostumbrados a soportar todo tipo de climas o inclemencias metereológicas, lo cual los hace cada vez más duros.
Pueden trabajar horas y horas sin éxito y luego estar dispuestos a intentar una vez más.
Son fuertes físicamente, trabajan en las noche sin descansar porque sus ventas generalmente son en las mañanas.
“..y los pescadores, habiendo descendido de ellas, lavaban sus redes.”
Mientras lo empujan de todo lado, estas barcas llaman su atención. Los pescadores están limpiando sus redes.
3 Y entrando en una de aquellas barcas, la cual era de Simón, le rogó que la apartase de tierra un poco; y sentándose, enseñaba desde la barca a la multitud.
“Y entrando en una de aquellas barcas, la cual era de Simón, le rogó que la apartarse de tierra un poco;..”
Jesús sabe cuál barca escoger.
Él tiene propósitos en todo lo que hace.
Elige la barca de uno de los pescadores, tal vez uno bastante experimentado, que era Simón.
Le pidió apartarse un poco hacia el mar.
“..y sentándose, enseñaba desde la barca a la multitud.”
Jesús empezó a dar un mensaje del evangelio a los miles que le seguían.
Pero Jesús no estaba ahí solamente por la multitud, él estaba en esa barca por una razón:
4 Cuando terminó de hablar, dijo a Simón: Boga mar adentro, y echad vuestras redes para pescar.
“Cuando terminó de hablar, dijo a Simón:..”
Finalizado su discurso se concentró en aquel hombre, duro y ordinario, llamado Simón. Él era hijo de un hombre llamado Jonás.
Jesús conoce el corazón de Simón:
No ha pescado nada. El sustento de su familia y sus agrupaciones pesqueras depende de las ganancias de cada día.
Ellos deben estar frustrados.
“..Boga mar adentro, y echad vuestras redes para pescar.”
“Boga” - regresar.
Jesús le pide regresar al mar y ahora pretende darles una clase de pesca.
Jesús tenía de oficio la carpintería, no es un hombre rudo como los pescadores, y en ese contexto parece ser algo atrevido al dar una instrucción así a profesionales.
Los judíos, aún de la clase social de pescadores, podían hacer caso a los maestros y rabinos para los asuntos espirituales, pero en una situación de pesca, esto era algo inconcebible.
5 Respondiendo Simón, le dijo: Maestro, toda la noche hemos estado trabajando, y nada hemos pescado; mas en tu palabra echaré la red.
“Respondiendo Simón, le dijo: Maestro, toda la noche hemos estado trabajando, y nada hemos pescado;..”
Simón, entonces, está dispuesto a ser sincero con Jesús.
Aún sea Jesús el maestro que trae un mensaje espiritual, Simón es el profesional en su área y han tenido una pésima noche.
Y de repente, cuando no han pescado nada, alguien que no sabe de pesca le pide preparar las redes y hacer todo el esfuerzo para intentar una vez más.
“..mas en tu palabra echaré la red.”
Pero Simón va a ser obediente.
Finalmente Jesús es alguien a quien la gente respeta. Tal vez no está convencido de sus cualidades de pescador, tal vez lo hace solo por el respeto, pero esas son las palabras del “maestro” y él debe obedecerlas.
6 Y habiéndolo hecho, encerraron gran cantidad de peces, y su red se rompía.
“Y habiéndolo hecho, encerraron gran cantidad de peces, y su red se rompía.”
Y el resultado fue sorprendente.
No pescaron nada toda la noche, pero el mismo Creador, el Hijo de Dios Padre, estaba en la barca, y la pesca era tal vez la más grande que había hecho en su historia de pescador.
La red se rompía.
¡Simón iba a necesitar nuevas redes!
7 Entonces hicieron señas a los compañeros que estaban en la otra barca, para que viniesen a ayudarles; y vinieron, y llenaron ambas barcas, de tal manera que se hundían.
“Entonces hicieron señas a los compañeros que estaban en la otra barca, para que viniesen a ayudarles; y vinieron,..”
¡Ahora, ya no pueden solos, requieren ayudar!
Llaman a la otra barca para que les ayuden y llenan ambas barcas, y es tanta la pesca que empiezan a hundirse.
Recuerda que ellos son hombres fuertes, rudos, de trato fuerte, preparados para cualquier inclemencia o situación.
“..y llenaron ambas barcas, de tal manera que se hundían.”
Pero ahora se están empezando a hundir por la pesca.
Me cuesta imaginar esta escena, sin pensar en los ojos de Simón.
¡No debe entender nada!
¡Ya no sabe si atender las redes, el pescado, o el barco! o tal vez, mirar tan solo a Jesús.
Este profesional de la pesca había sido desarticulado por el profesional en tocar las vidas.
8 Viendo esto Simón Pedro, cayó de rodillas ante Jesús, diciendo: Apártate de mí, Señor, porque soy hombre pecador.
“Viendo esto Simón, cayó de rodillas antes Jesús,..”
Simón ya no puede más, el hombre fuerte y rudo, cae cautivo ante Jesús.
Ponerse de rodillas no es algo que hace un judío devoto, aún pescador, sin ningún motivo.
Solo los judíos pueden rendirse de rodillas a Dios, de lo contrario pueden ser acusados de idolatría y la muerte está descrita en la Ley.
Más Pedro, está abrumado. Solo puede doblar sus rodillas, e inclinarse ante aquel que está delante de Él, como soberano de la Creación.
“..diciendo: Apártate de mí, Señor, porque soy hombre pecador.”
Pedro está reconociendo la naturaleza de aquel llamado “maestro”.
Él efectivamente venía del Padre.
Se siente miserable y reconoce su pecado ante el Santo que está delante suyo.
Acaba de hacer “check” en la lista de la única cosa que se requiere para que Jesús trabaje en tu vida, y es reconocerte pecador delante del Señor.
Y el motivo de las rodillas dobladas es explicado:
9 Porque por la pesca que habían hecho, el temor se había apoderado de él, y de todos los que estaban con él,
“Porque la pesca que habían hecho, el temor se había apoderado de él, y de todos los que estaban con él,”
Esto no era normal para Simón, ni para nadie.
Esto no había pasado antes y todos ellos son expertos en la pesca.
Claramente, estaba delante de ellos, aquel enviado mesías, que iba a hacer señales para mostrar de dónde él procedía, del Padre.
Así que ya no hay hombres profesionales en la pesca, sino hombres llenos de temor delante del Hijo de Dios.
10 y asimismo de Jacobo y Juan, hijos de Zebedeo, que eran compañeros de Simón. Pero Jesús dijo a Simón: No temas; desde ahora serás pescador de hombres.
“y asimismo de Jacobo y Juan, hijos de Zebedeo, que eran compañeros de Simón...”
Y ya sabemos ahora, quienes estaban cerca.
Jacobo y Juan, aquellos hombres duros, que querían que caiga fuego del cielo sobre los samaritanos por no recibir a Jesús.
Y ahora, el Rey eterno, va a hablar. Y va a calmar a Simón:
“Pero Jesús dijo a Simón: No temas; desde ahora serás pescador de hombres.”
Y el plan de Jesús, fue revelado.
Sí, quería ir a Galilea a anunciar el evangelio a multitudes.
Pero también estaba yendo en busca de alguien común, ordinario, alguien duro, con educación seriamente limitada, alguien que solo vive de la pesca para su economía, pero que era especial para el que Conoce los corazones.
Y Jesús, le daba un nuevo propósito a Simón: “..serás pescador de hombres”.
Jesús estaba enfrentando a Simón con todo lo que era importante para este pescador.
Marcos 1.16-20, relata el mismo suceso, pero cita a Jesús en este llamado:
17 Y les dijo Jesús: Venid en pos de mí, y haré que seáis pescadores de hombres.
Simón es confrontado. Toda su vida debe cambiar si va a seguir a Jesús.
Y esta es su respuesta:
11 Y cuando trajeron a tierra las barcas, dejándolo todo, le siguieron.
“Y cuando trajeron a tierra las barcas, dejándolo todo, le siguieron.”
Y esta es la parte más maravillosa.
Es un hombre llamado Simón y otros pescadores, renunciando a sí mismos y a todo lo que tenían por seguir a Jesús.
Estarán dejando el sustento familiar que ellos llevaban a casa, para que sea Jesús el que marque su nueva vida, y sea Él el que sustente a los suyos.
Están dejando la tradición familiar de la pesca, para que sea Jesús, quien pueda dar vida a sus familias.
Y no es una decisión fácil. No en el tiempo de ellos. Van a dejar todo lo que ellos eran, los rudos pescadores, para ser trabajados por el Señor.
Aquel que pedía por fuego para los samaritanos, Juan, va a ser llamado luego el discípulo del amor.
Y aquel, último en ser elegido y con menos cualidades de todos, va a ser llamado a pastorear las ovejas de Jesucristo.
Simón era un hombre común, mucho más corriente de lo que podríamos imaginar. No podría formar parte de ningún equipo, a excepción de uno muy especial, del cuál SOLO JESÚS podría ver y llamarlo.
Y eso no quiere decir que Simón, no iba a tener luchas y caídas severas.
Él recibió un nombre nuevo de Jesús. Lo llamó: Simón “Pedro” - “Roca”.
Pedro todavía era rudo y algo torpe.
¡Podríamos preguntarnos si Jesús realmente lo escogió bien!
Jesús tuvo que regañar varias veces a Pedro.
Jesús le habla de que irá a la cruz y Pedro le dice, que: “..Jesús tenga compasión de sí mismo, que nada de eso le acontezca”.
¡Vaya regaño que se lleva Pedro!
Jesús necesita tanto de sus discípulos porque está padeciendo en Getsemaní y Pedro se quedan dormido en vez de orar con él.
Jesús viene con un mensaje de paz a pesar de que lo quieren arrestar para crucificarlo y Pedro toma su espada y corta la oreja al Soldado.
Y Jesús tiene que sanar a ese soldado.
Jesús es finalmente arrestado y Pedro lo niega tres veces por salvar su vida.
¿Alguien más acá llamaría a Pedro a seguirle?
Tal vez no para el razonamiento humano, pero sí para Cristo.
Finalmente, quiero llevarte a una última escena de Jesús y Simón Pedro.
Para que veas lo común de este hombre Pedro.
Porque tal vez así nos podramos identificar.
Luego que Jesús es crucificado, resucita y empieza a presentarse delante de sus discípulos, hay una escena muy emotiva.
Será ya casi la despedida de Jesús y Simón Pedro.
(LEER VERSÍCULOS GRANDES)
1 Después de esto, Jesús se manifestó otra vez a sus discípulos junto al mar de Tiberias; y se manifestó de esta manera: 2 Estaban juntos Simón Pedro, Tomás llamado el Dídimo, Natanael el de Caná de Galilea, los hijos de Zebedeo, y otros dos de sus discípulos.
Prácticamente están los pescadores y los más cercanos.
Su maestro fue crucificado.
Ellos todavía no comprendían bien todo lo que había pasado y el impacto de la resurrección era algo difícil para ellos.
Y cuando Jesús había sacado a Pedro de ser pescador en los mares, sucede lo siguiente:
3 Simón Pedro les dijo: Voy a pescar. Ellos le dijeron: Vamos nosotros también contigo. Fueron, y entraron en una barca; y aquella noche no pescaron nada.
Pedro había vuelto atrás. Había vuelto a la barca y a las redes.
Parecía haber tenido éxito el intento de las fuerzas oscuras de vencer el mensaje de salvación de Cristo.
Los discípulos estaban volviendo atrás.
Y Pedro ha negado 3 veces a Jesús y en vez de morir por su maestro, él ha escapado de la muerte, mintiendo y negando a Jesús.
Y si nadie veía a Pedro con cualidades para llamarlo y ser líder, ahora, ni él mismo debe estar pensando que eso es posible.
¡Pero que escena!:
Ya había pasado hace 3 años atrás lo mismo. No habían pescado nada.
Pedro necesita una última intervención celestial.
4 Cuando ya iba amaneciendo, se presentó Jesús en la playa; mas los discípulos no sabían que era Jesús. 5 Y les dijo: Hijitos, ¿tenéis algo de comer? Le respondieron: No. 6 El les dijo: Echad la red a la derecha de la barca, y hallaréis. Entonces la echaron, y ya no la podían sacar, por la gran cantidad de peces.
¡El maestro volvía a entender sus necesidades emocionales y espirituales!
Esos hombres estaban desorientados y tal vez deprimidos por todo lo que había acontecido.
Ellos no comprendían aún totalmente la victoria de la cruz y la gloria de la resurrección.
Los expertos pescadores vuelven a escuchar un comentario sobre cómo pescar bien.
Y cuando hicieron caso, nuevamente no podían sacar la red por la gran cantidad de peces.
¡Exactamente como cuando por primera vez JESÚS fue por ellos!
¡El corazón de Pedro debe estar volviendo a latir una vez más!
7 Entonces aquel discípulo a quien Jesús amaba dijo a Pedro: ¡Es el Señor! Simón Pedro, cuando oyó que era el Señor, se ciñó la ropa (porque se había despojado de ella), y se echó al mar.
¡Y Pedro no aguantó!
Era Jesús nuevamente buscándolo a él y a cada uno de ellos.
Se puso su ropa, y no quiere perder ni un segundo en ver a su maestro de nuevo, él se lanza y va hacia Jesús.
La escena es aún más emotiva y Jesús va a prepararles algo de comer. Pero debes leerlo eso tú.
Yo quiero ir a la parte final.
Jesús va a hacer tres preguntas muy difíciles a Simón Pedro.
15 Cuando hubieron comido, Jesús dijo a Simón Pedro: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas más que éstos? Le respondió: Sí, Señor; tú sabes que te amo. El le dijo: Apacienta mis corderos.
Jesús pregunta a Simón Pedro si le ama.
Qué difícil decir SI, después de haberle negado tres veces.
Simón, responde que Sí le ama.
Pero Jesús parece estar diciéndole ¿Qué haces entonces acá? Ya no eres pescador del mar, Pedro.
Jesús le dice, que él debe apacentar sus ovejas.
Y la escena se vuelve a repetir dos veces más:
16 Volvió a decirle la segunda vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Pedro le respondió: Sí, Señor; tú sabes que te amo. Le dijo: Pastorea mis ovejas.17 Le dijo la tercera vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Pedro se entristeció de que le dijese la tercera vez: ¿Me amas? y le respondió: Señor, tú lo sabes todo; tú sabes que te amo. Jesús le dijo: Apacienta mis ovejas.18 De cierto, de cierto te digo: Cuando eras más joven, te ceñías, e ibas a donde querías; mas cuando ya seas viejo, extenderás tus manos, y te ceñirá otro, y te llevará a donde no quieras.
Y Jesús le reiteró que lo estaba llamando para servirle.
19 Esto dijo, dando a entender con qué muerte había de glorificar a Dios. Y dicho esto, añadió: Sígueme.
Y lo último que sabemos entre Jesús y Simón Pedro es extraordinario.
Una vez más, al igual que la primera vez, le volvió a decir: SÍGUEME.
¡Lo volvió a llamar!
Y Pedro una vez más le siguió.
Su maestro se fue, más Pedro se quedó.
Luego Pedro trastornó el mundo. En muchas ocasiones, miles de personas se rindieron a Cristo por la predicación del evangelio.
Hasta nos escribió dos preciosas epístolas sobre lo que es la fe en Cristo.
Y la tradición cristiana, dice que Pedro murió bajo el cruel emperador Nerón.
Orígenes de Alejandría en el siglo II-III, dijo que quisieron crucificarlo al igual que a su maestro.
Pero esta vez Pedro no negó a Cristo.
Al contrario, según Orígenes, Simón Pedro se negó a ser crucificado al igual que Jesús porque se sintió indigno de ÉL y pidió ser crucificado boca abajo.
Pedro dio su vida por su fe y por su Jesús, su maestro. Y de esa manera trastornó el mundo perdido en el que vivía. Y su testimonio de fe nos emociona hasta el día de hoy.
MEDITEMOS EN LA PALABRA
MEDITEMOS EN LA PALABRA
Si queríamos saber si el Señor puede usar a gente común y ordinaria, que no muchos ven muchas cualidades o no calificamos, ahora sabemos que el Señor sí puede tomar lo que el mundo no podría tomar, para también trastornar el lugar donde vivimos.
El mismo que llamó a Simón Pedro, también nos llama hoy.
Y es probable que al igual que a Simón Pedro, algunas cosas que han pasado en nuestras vidas, tal vez la negación a Jesús, tal vez los problemas de la vida y lo mal que hemos vivido, nos hayan dejado fuera del juego de nuevo.
Pero Jesús sigue llamando una vez más.
“Sígueme”.
Pero debes saber que seguir a Jesús, también implica dejar toda una vida donde el sustentador de tu vida y de tu familia eres tú.
Para comprender que el Señor sí quiere que participemos de la redención de las personas.
ES QUE NO HAY OTRA FORMA DE TRASTORNAR EL MUNDO, SI NO ES CON LA FE.
¿Cuántas personas viven cerca a nosotros, o aún en nuestra misma casa, que necesitan tando del Señor, pero nosotros no estamos moviendo sus vidas por el testimonio de nuestra fe?
El Señor si nos está llamando, y nos ha puesto en distintos lugares, distintos campos, para que podamos servirle y trastornar a un mundo perdido.
Y si crees que no tienes esas cualidades, estás muy equivocado.
¿Sabes que él sigue llamando a personas comúnes u ordinarias a seguirle para darles nuevos propósitos de vida?
¿Sabes que ÉL sigue llamando a personas comúnes para que sean ejemplos de fe en sus hogares?
¿Sabes que Él sigue llamando a hijos e hijas, para que sigan siendo ejemplo de fe, en un mundo de jóvenes que se está perdiendo?
¿Sabes que ÉL sigue llamando a personas comúnes para servir en su Iglesia Universal y Local?
¿Cuándo vamos a caer también de rodillas antes Jesús y vamos a querer servirle?
6 Pero no hallándolos, trajeron a Jasón y a algunos hermanos ante las autoridades de la ciudad, gritando: Estos que trastornan el mundo entero también han venido acá; 7 a los cuales Jasón ha recibido; y todos éstos contravienen los decretos de César, diciendo que hay otro rey, Jesús.
De forma muy práctica. Podemos también mostrar que Jesús es nuestro rey.
Hoy en la iglesia, necesitamos muchas manos en cada una de las áreas.
Y nosotros personas comúnes y ordinarias, podemos ser utilizados de gran manera por el Señor, porque Él es nuestro Rey, y no hay otro.
Vamos a orar.